En medio de la polémica por el aumento de las dietas de los senadores, el caso de Daniel Scioli reabrió la controversia por las jubilaciones de privilegio que cobran ex presidentes, ex vicepresidentes o sus viudas en las cuales Cristina Kirchner lleva la delantera con dos que ascienden en total a 14.548.836 pesos, el mes pasado. Y el senador Adolfo Rodríguez Saá tiene el récord de cobra esa pensión vitalicia pese a haber sido presidente provisional durante 7 días, entre otros casos irregulares.
Daniel Scioli empezó a cobrar una jubilación de privilegio como ex vicepresidente cuando perdió el balotaje presidencial en el 2015 frente a Mauricio Macri. Dos años después fue elegido diputado nacional por el peronismo.
Pero en el 2020, dejó de cobrarla cuando fue nombrado por el ex presidente Alberto Fernández embajador en Brasil porque “recibía un sueldo en dólares que le era más favorable”, afirmó la diputada Graciela Ocaña.
El 14 de febrero de este año fue nombrado Secretario de Turismo, Ambiente y Deportes ad honoren, es decir sin cobrar sueldo, del gobierno de La Libertad Avanza. Fue designado a través del decreto 133 del presidente Javier Milei, al que accedió Clarín, y casi simultáneamente volvió a pedir el alta de su asignación honorífica como ex vicepresidente que es de unos 5 millones de pesos, aunque depende de la antigüedad y otras variables. El sueldo de un secretario de Estado en enero fue de 3.282.709 pesos y obviamente con la pensión vitalicia cobrará más.
La diputada de Confianza Pública Ocaña presentó una serie de pedidos de acceso a la información pública a la ANSES y el 26 de marzo le contestaron: “Scioli es titular del beneficio en cuestión, con alta para el mes de marzo de 2024, siendo que la liquidación se encuentra retenida por la Dirección General de Control Prestacional”.
Un vocero de Scioli consultado por Clarín minimizó las declaraciones de Ocaña y dijo: “Daniel ya lo explicó cuando salió su designación como secretario de Turismo. Dijo que cuando terminó su período como Embajador volvió a pedir esa pensión como ex vicepresidente, como le corresponde por ley a todos los ex presidentes y vicepresidentes”.
En cambio, Ocaña dijo a Clarín que estima que las idas y venidas de Scioli con su pensión vitalicia “sería legales pero no es ética y va a contramano de la realidad salarial de millones de argentinos”.
La ex titular del PAMI se ha convertido en una experta en la materia de pensiones vitalicias. Tiene un recurso extraordinario en la Corte para poder ser querellante en la irregular causa en la que a Cristina Kirchner el juez subrogante de la Seguridad Social, Ezequiel Pérez Nami, le asignó la pensión que le corresponde como ex presidenta y la de Néstor Kirchner. Lo hizo a pesar de que la ley N° 24.018, promulgada por Carlos Menem en 1991, dice claramente que solo se puede acceder a un beneficio. Además, el entonces fiscal Gabriel De Vedia –que luego fue ascendido a juez de la Cámara Nacional del Trabajo- no apeló, al igual que la ex titular de la ANSES y dirigente de La Cámpora Fernanda Raverta.
Esa ley asigna a los ex presidentes y ex vicepresidentes una pensión vitalicia de carácter honorífico equivalente al sueldo de un ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Y, por otro lado, Ocaña lidera una campaña en las redes sociales para que el ex presidente Alberto Fernández no cobre su pensión vitalicia de unos 7 millones de pesos porque, sostiene, “no tiene residencia en Argentina como determina la ley, sino en España”.
Ante este cúmulo de contradicciones, Ocaña envió una iniciativa ciudadana al Congreso de la Nación con copia al presidente Javier Milei y al ministro de Economía, Toto Caputo, para establecer que los ex presidentes y ex vicepresidentes cobren en efectivo solo la máxima jubilación que le autoriza la ANSES. Actualmente, es de 1,2 millones de pesos. Y para evitar eventuales juicios por “derechos adquiridos”, que la diferencia con la pensión vitalicia se pague con bonos previsionales a 30 años. La propuesta va acompañada de más de 58 mil firmas obtenidas a través de Change.org.
El proyecto, al que accedió Clarín dice en su artículo 2° sobre estas pensiones vitalicias: “Establécese que el haber máximo vigente a partir del mes de mayo de 2024, dispuesto de conformidad con las previsiones del artículo 9° de la Ley N° 26.417 y el artículo 4° del Decreto N° 274/24, será de PESOS UN MILLON DOSCIENTOS SETENTA Y NUEVE MIL CUATROCIENTOS SETENTA Y DOS CON NOVENTA Y DOS CENTAVOS ($1.279.472,92)”. Ese es el máximo que puede cobrar un jubilado con 30 años de aportes.
La lista de beneficiarios de Asignaciones Mensuales Vitalicias para Presidentes y Vicepresidentes, a partir del régimen establecido por la Ley N° 24.018 de 1991 actualmente está integrada por:
– Ex vicepresidenta María Estela Martínez Cartas de Perón: $ 3.603.023. Es la que menos cobra porque su beneficio es anterior a la ley de Menem del 91.
– Ex presidenta Cristina Elisabet Fernández: cobra $ 6.441.330 por la pensión de Néstor y $8.107.506 de su propia jubilación, es decir un total de 14.548.836. Ocaña espera que la Corte eventualmente la deje ser querellante en la causa por esta jubilación de privilegio.
– Ex vicepresidente y actual senador por Mendoza Julio César Cleto Cobos: $ 5.012.213.
– Ex presidente provisional y actual senador por San Luis Adolfo Rodríguez Saá: $ 6.682.948. Fue presidente 7 días tras la caída del ex presidente Fernando De la Rúa.
– Inés Pertiné, viuda del ex presidente Fernando De la Rúa: $ 4.890.423.
– Ex vicepresidente Amado Boudou: $ 4.244.250. Cobra la pensión honorífica pese a que fue condenado a 6 años de prisión en el caso Ciccone. Algunos abogados sostiene que debería derogarse ese beneficio por su sentencia.
– Ex presidente Mauricio Macri: $ 6.973.574.
– Ex vicepresidenta Gabriela Michetti: $ 5.065.859.
La ANSES aclaró que el ex presidente provisional Eduardo Duhalde “no percibe” una asignación del régimen establecido por la Ley N° 24.018. Duhalde ocupó el sillón de Rivadavia entre el 2 de enero de 2002 y el 25 de mayo del 2003.
En estos meses de ajuste donde se registró un 16 por ciento de pérdida del poder adquisitivo de los sueldos de los trabajadores y más de los jubilados, las jubilaciones de privilegio y el aumento de las dietas de los senadores generaron una fuente reacción en las redes sociales.
A contramano de estas maniobras, el senador del Frente Pro de Córdoba Luis Juez presentó un proyecto, junto a otros legisladores, para que en la próxima sesión de la cámara alta se de marcha atrás con el aumento de las dietas. Además, pidió a la presidenta provisional del Senado, Victoria Villarruel, que no le den el aumento. Pero, prometió en forma pública, que “si esto no sucede porque no se puede administrativamente, tomaremos la determinación de donarlo a una ONG o una institución sin fines de lucro”. ¿Otros harán lo mismos con sus jubilaciones de privilegio o dietas aumentadas?