El portal especializado en psicología Psychology Today indicó que en vez de enojarse visiblemente, los pasivos-agresivos expresan su hostilidad de maneras diseñadas para herir y confundir a su objetivo.
“La agresión pasiva surge de una profunda ira, hostilidad y frustración que una persona, por cualquier razón, no se siente cómoda expresando directamente. Cuando se trata de un comportamiento pasivo-agresivo, es importante entender que debajo de todos esos comentarios sarcásticos se esconde una profunda infelicidad y tristeza”, agregó.
Los expertos indicaron que algunos de los signos comunes de este tipo de comportamiento incluyen evitar la responsabilidad de las tareas, postergar e incluso no cumplir con los plazos, retener información importante, no lograr los resultados esperados, negarse a discutir preocupaciones abiertamente y ser deliberadamente ineficiente.
Con el fin de conocer más sobre este comportamiento negativo expertos encuestaron a más de 1200 estadounidenses sobre su experiencia con las frases típicas de estas personas.
De acuerdo con los hallazgos, estas fueron las cinco frases utilizadas por los sujetos pasivo-agresivos:
Según los encuestados, frases con el propósito de echar la culpa a los demás (“Sos demasiado sensible” y “¿Por qué te enojás tanto?”) fueron las peores con un 26%.
Frases que reflejaron ser crítico o condescendiente (“No quiero ofender, pero…” y “Si eso es lo que querés hacer…”) obtuvieron el 16% y aquellas enfocadas en negar el enojo (”Lo que vos digas.) recibieron el 15%.
“Expresadas de manera pasivo-agresiva, todas estas frases dejan en claro que lo que el hablante está diciendo y sintiendo no es lo mismo”, indicaron los expertos.
El estudio también revisó cuáles eran las frases más utilizas por las personas pasivo-agresivas en el ámbito laboral. “Al observar estas frases, puede detectar un indicio de frustración o falta de transparencia en cada una de ellas”, explicaron.
EL TIEMPO (GDA)
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