Jugó en Boca, fue dirigido por Bianchi y dio el salto a Europa, pero en la actualidad es ingeniero agrónomo.
Jugar en Boca Juniors o River Plate, los dos equipos más grandes del fútbol argentino, es un paso clave para cualquier futbolista, ya que estos clubes compiten al más alto nivel y son una gran vidriera para dar el salto a Europa. A lo largo de su historia, ambas instituciones exportan miles de jugadores al Viejo Continente.
Un claro ejemplo de esto es Emiliano Albín, entre tantos otros. El exdefensor dio el salto a Europa luego de un breve paso por el «Xeneize». Allí fue dirigido por Carlos Bianchi, aunque su estadía fue sin pena ni gloria. Tras jugar en Portugal y diversos equipos, se retiró y se dedicó a otro rubro diferente.
Emiliano Albín y su paso por el fútbol
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Albín llegó a Boca luego de alcanzar la final de la Copa Libertadores con Peñarol.
La carrera de Albín comenzó en Peñarol, uno de los clubes más grandes de Uruguay, donde se destacó como lateral derecho. Durante su tiempo en el club, logró el campeonato uruguayo 2009/2010 y alcanzó la final de la Copa Libertadores 2011, donde su equipo enfrentó al Santos de Neymar.
En 2012, dio un paso importante en su carrera al llegar a Boca, bajo la dirección de Bianchi. Aunque su tiempo en el club fue breve, le permitió dar el salto al Arouca en Portugal. Sin embargo, regresó a la Argentina para jugar Atlético Tucumán.
Luego de su paso por el «Decano», recaló en Deportivo Santaní en Paraguay. Finalmente, regresó a su país natal, donde cerró su carrera jugando para Juventud Las Piedras y Villa Española.
Su vida después del retiro
Después de años de combinar el fútbol con estudios, Albín se recibió como ingeniero agrónomo en 2023, especializándose en el mantenimiento de campos deportivos. Si bien aún no tiene un trabajo estable, puede convertirse en el intendente de la Ciudad Deportiva de Peñarol.
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