En un episodio que alarmó tanto a los espectadores como a los participantes de Gran Hermano, Martina Pereyra sufrió una descompensación y perdió el conocimiento dentro de la casa. El hecho quedó registrado por las cámaras del programa, lo que generó una gran repercusión en las redes sociales y obligó a la producción a contactar a su familia.
El equipo médico del reality intervino de inmediato y le recetó a la participante una dieta especial que incluyera alimentos más nutritivos para ayudar en su recuperación. Más tarde, las cámaras del programa la mostraron comiendo los alimentos indicados, dejando en claro que estaba fuera de peligro.
A través de sus redes sociales, la familia de Martina emitió un comunicado en el que agradecieron la atención médica brindada por la producción y confirmaron que la joven se encontraba estable. Sin embargo, manifestaron su preocupación por la situación y señalaron que estarán atentos a su evolución en las próximas horas.
“Queríamos informarles que Martu ya se encuentra bien. Tuvo una baja de presión, pero ya está recuperándose. Gracias a todos por preocuparse”, sostuvieron desde el entorno más cercano de la joven.
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El incidente pone en foco la presión y las condiciones a las que están sometidos los participantes del reality. Si bien la producción aseguró que la situación fue controlada, el desmayo de Martina evidenció la importancia de monitorear de cerca la salud física y mental de los concursantes en este tipo de programas.
La familia cerró su mensaje con un pedido de respeto hacia Martina y expresó su gratitud por los mensajes de apoyo recibidos. La participante seguirá bajo observación para garantizar que no haya complicaciones futuras.
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