Jorge Vasconcelos, economista, se manifestó a favor de dejar flotar el dólar sin restricciones ante el nuevo escenario económico que plantea el apoyo explícito que el Tesoro de los Estados Unidos manifestó con respecto hacia Argentina.
La postura de Jorge Vasconcelos con respecto al apoyo de Estados Unidos y el esquema cambiario
El economista manifestó que la sola eliminación de retenciones no era del todo conveniente, debido a que los productores podían ‘darse vuelta’ e ir a comprar dólares, lo cual podía acentuar la presión sobre el BCRA.
«La restauración del ‘dólar soja’ por sí sola no alcanzaba, porque los productores podían haber aprovechado para desprenderse de granos y, en la otra ventanilla, comprar dólares», señaló Vasconcelos. En consecuencia, argumentó que «también hacía falta romper con el síndrome de la manta corta, por el cual la venta de dólares en el techo de la banda hacía subir el riesgo país».
En esa línea, destacó como relevante conocer los detalles de los instrumentos que utilizará el Tesoro de los Estados Unidos -que se conocerían tras la reunión que mañana mantendrán en Nueva York, Donald Trump y Javier Milei- porque «prometen ser de impacto».
«Si el Tesoro de Estados Unidos llegara efectivamente a comprar bonos soberanos de la Argentina, sería un cambio radical respecto del funcionamiento de las instituciones post Segunda Guerra Mundial», aseguró Vasconcelos.
El economista manifestó que «el poder de fuego del FMI es insignificante respecto de lo que mostró el Banco Central Europeo en la crisis de 2012, cuando su entonces presidente, Mario Draghi, anunció que pasarían a comprar bonos de Grecia y otros países europeos jaqueados«.
A la vez detalló que «el FMI sigue cumpliendo funciones de auditoria, pero un actor como el Tesoro de Estados Unidos o el Banco Central Europeo, tienen la posibilidad de evitar pulseadas contra países en dificultades que están ejecutando un programa macroeconómico que apunta a corregir distorsiones previas».
«En el plano cambiario, soy partidario de dejar flotar el precio del dólar, y en todo caso que el Banco Central haga ‘guerra de guerrillas’ para moderar las fluctuaciones, confiando en la efectividad de sintonía fina en la política monetaria para contener el traspaso a precios», agregó el economista. Vanconcelos evaluó que «ir hacia ese esquema dejaría de ser traumático bajo las nuevas condiciones que plantean las novedades de hoy».
El escenario que se abre para el dólar si Donald Trump sale al rescate del plan Milei
«Lo esperable es que los bonos operen en verde: el mercado va a ver la movida de Estados Unidos como una cuestión que puede cambiar las cosas. Y los bonos bajaron mucho y muy rápido durante las últimas semanas, en un contexto en donde el resto de los países emergentes están a un dígito de riesgo país», sugiere desde Nueva York el analista de uno de los bancos más activos en Argentina.
«En el mercado cambiario -sugiere la misma fuente- también deberíamos ver más calma. Sin embargo, con el dólar es más complicado. Porque es poco claro que EEUU le preste plata para defender el tipo de cambio, que luce insostenible. Sin embargo, al ser un préstamo político -para sostener la administración Milei y para que no avance el ‘comunismo’, también hay que ponderar que le prestan a la Argentina para que no devalúe, al menos hasta las elecciones».
Durante los tres días consecutivos de intervenciones, el BCRA vendió u$s1.110 millones, distribuidos de esta forma:
- Miércoles: u$s53 millones
- Jueves: u$s379 millones
- Viernes: $678 millones.
Sin el anuncio de la cumbre Trump-Milei (mañana martes a la mañana), lo más probable hubiese sido una espiralización de la desconfianza cambiaria y una masiva venta de dólares hasta las elecciones.
No es que ahora se pueda cortar del todo esa dinámica. En el mercado local y en Wall Street coinciden en que las ventas podrían continuar pero más contenidas.
¿La razón? La expectativa en el mercado es que la Argentina tendrá que mover el tipo de cambio luego de las elecciones. Que el sistema de bandas cambiarias desaparecerá después del 26 de octubre, y que esa sería una de las condiciones del Tesoro estadounidense para avanzar en un crédito.
Bajo esa expectativa, los inversores y ahorristas locales seguirán demandando divisas. La presión, sin embargo, sería menor ya que los fondos del Tesoro americano servirían para estabilizar el post 26-O.